Trabajar como expatriado en otro país: esta es la realidad cotidiana de muchos empleados de SEKISUI. ¿Le gustaría saber cómo es trabajar en un país extranjero y experimentar la diferencia entre Japón y Europa? Hemos hablado con Tom Hirayama, un expatriado que trabaja actualmente para SEKISUI CHEMICAL GMBH en Düsseldorf (Alemania), y le hemos preguntado sobre su vida de expatriado.
Tomohiro (Tom) Hirayama (Marketing Manager, Automotive and Transportation Marketing Group) tiene 31 años y nació en Gyoda, una ciudad ubicada en la prefectura de Saitama, en Japón. Junto con su hermano, Tom se crió y fue a la escuela en Saitama antes de decidir irse al extranjero.
Tom se ha interesado por diferentes países y culturas desde que era un adolescente. «Quería estar rodeado de diferentes nacionalidades y vivir en otro país», explica. Al terminar el instituto, se marchó a California (EE. UU.) a estudiar «Relaciones Internacionales: Comercio Internacional y Desarrollo».
«Vivir y estudiar en el extranjero ha sido una experiencia que me ha cambiado la vida. Había vivido en Japón 18 años, así que no había hablado con ningún extranjero o ni siquiera lo había hecho en inglés. El idioma fue el primer reto que tuve que superar. Tardé casi 13 meses en sentirme seguro en inglés».
A día de hoy, Tom es capaz de comunicarse con japoneses y europeos con gran facilidad. «Mi experiencia en el extranjero me ha aportado dos cosas muy importantes: puedo expresarme en un segundo idioma, algo clave para tener éxito en una sociedad global, y, al mismo tiempo, he desarrollado una fuerte identidad como japonés. Puesto que no todo el mundo puede visitar Japón, me veo como una especie de representante de mi país».
Al graduarse en la Universidad de California en 2011, Tom volvió a Japón y trabajó como profesor de inglés durante nueve meses. En abril de 2012, Tom entró a trabajar en SEKISUI en Japón y, en noviembre de 2018, se incorporó a SEKISUI CHEMICAL GMBH en Düsseldorf (Alemania).
El nuevo hogar de Tom: Düsseldorf (Alemania)
El nuevo hogar de Tom: Düsseldorf (Alemania)
¿Cuáles son exactamente sus cometidos?
Mi cometido en SEKISUI CHEMICAL GMBH es el lanzamiento de un nuevo negocio en la industria automovilística europea promocionando los actuales productos y planificando el desarrollo de productos en nuevos mercados. Los fabricantes de coches europeos son líderes mundiales en el mercado de la automoción. Ellos aplican de forma activa nuevas tecnologías a sus productos y los demás les siguen. Entrar en el mercado europeo tiene efectos positivos para SEKISUI a nivel global.
En 2020, por ejemplo, me centraré en iniciativas de marketing para la promoción de carcasas de plásticos especiales fabricadas mediante tecnologías de moldeo por inyección. A medida que los automóviles con sistemas avanzados de asistencia a la conducción y motores eléctricos entren en el mercado, la demanda de dispositivos de protección contra la interferencia electromagnética (EMI) y materiales ligeros aumentará rápidamente.
¿Por qué le gusta trabajar en SEKISUI CHEMICAL GMBH?
Para mí, la empresa desempeña un papel esencial en la apertura de nuevos mercados en Europa. Me gusta el hecho de que cada acción es un paso adelante y de que hay un gran potencial para aumentar las ventas y los beneficios. Además, colaboramos con diversas empresas dentro de SEKISUI, algo que también considero una ventaja.
Tom con algunos de sus compañeros de SEKISUI CHEMICAL GMBH
Tom con algunos de sus compañeros de SEKISUI CHEMICAL GMBH
¿En qué medida se diferencian las empresas japonesas y alemanas entre sí?
Cuando llegué a Alemania, tenía dificultades para expresarme. En Alemania, las palabras y las emociones suelen estar conectadas a las personas que hablan: puedo ver y oír, literalmente, sus emociones en sus palabras. A veces, me he sentido abrumado por sus actitudes vehementes y confiadas. Sin embargo, me he dado cuenta de que esta forma de expresión directa es muy clara y fácil de comprender. Los japoneses tienden a utilizar expresiones indirectas y dudan en mostrar sus emociones.
También he notado una diferencia en lo referente al nivel de conocimientos. Los japoneses son generalistas, mientras que los alemanes son especialistas. En Japón, la gente trabaja a menudo en empresas que no están directamente relacionadas con las materias que han estudiado; las empresas, por su parte, trasladan a los empleados a distintos departamentos con el fin de disponer de muchos tipos de trabajos y personas. Esto es diferente en Alemania. Según mi experiencia, los alemanes escogen sus estudios en función de sus intereses y, posteriormente, profundizan sus conocimientos para especializarse en determinadas áreas.
Esta forma de trabajar diferente conlleva una mentalidad distinta con respecto al ámbito del trabajo y del tiempo. Puesto que las tareas y los conocimientos suelen solaparse en Japón, los empleados pueden ampararse en los demás cuando están ausentes. En Alemania, las tareas y responsabilidades parecen estar más bien divididas, y cada empleado genera el máximo rendimiento posible en sus tareas y proyectos.
Otra cosa que me ha llamado la atención: la conciliación entre la vida laboral y personal en Alemania y Europa. Los empleados disfrutan de un buen equilibrio entre la vida profesional y privada. Trabajan de manera eficiente, salen a su hora y se toman tiempo suficiente para sus aficiones y largas vacaciones. No viven para trabajar; trabajan para vivir.
Sin embargo, hay una característica que observo tanto en los trabajadores japoneses como en los alemanes: las personas se apoyan entre sí y no dejan nunca un trabajo inacabado.
¿Cómo es un día habitual de trabajo?
Normalmente me levanto sobre las 8 de la mañana, salgo de casa a las 8:30 y llego al trabajo a las 9 (dependiendo del tráfico, ya que voy en coche). No soy una persona madrugadora y empezar a las 9 me va bien. 😊
Dada la variedad de tareas, no hay dos días iguales. Al ser el punto de contacto entre mis compañeros en Japón y en Europa, suelo tener muchas reuniones con clientes potenciales para promocionar los productos de SEKISUI y conocer mejor las necesidades del cliente. De esta forma, estoy en contacto constante con mis compañeros japoneses y alemanes, pero también con muchos compañeros europeos, como los que integran el nuevo equipo de SEKISUI POLYMATECH EUROPE.
A la hora de comer, intento tomar un poco de aire fresco dando un paseo hasta alguno de los restaurantes cercanos. A veces, también me llevo mi comida. Por la tarde, suelo terminar sobre las 6 y me gusta explorar la gran oferta gastronómica de Düsseldorf. ¡Hay algunos restaurantes japoneses fantásticos!
¿Qué hace en su tiempo libre?
Me gusta hacer fotografía, leer, crear vídeos y viajar a otros países europeos con mi mujer. Además, toco el ukelele siempre que puedo.
Tom disfruta conociendo nuevos lugares y plasmando sus recuerdos en fantásticas fotografías
Tom disfruta conociendo nuevos lugares y plasmando sus recuerdos en fantásticas fotografías
¿Qué se llevará consigo cuando vuelva a Japón de aquí a unos años?
Me llevaré las muchas cosas que habré aprendido. A nivel profesional, sabré mucho más sobre métodos para abrir nuevos mercados y sobre el propio mercado europeo. Trabajar a nivel global me permite adaptarme a los estándares globales. Espero que tanto mi experiencia como mis conocimientos ayuden a SEKISUI a transformarse de una típica empresa japonesa a una empresa global.
Cuando vuelva dentro de unos años (espero poder quedarme al menos cinco años), habré aprendido sobre la forma europea de trabajar. Me gusta la idea de generar el máximo rendimiento posible y, al mismo tiempo, no estar totalmente estresado y tener tiempo para uno mismo.
A nivel puramente personal, espero poder volver hablando tres idiomas: japonés, inglés y alemán.